Te hemos contado que la Flor de la Vida es una forma sagrada, exacta e inmutable del ESPACIO y TIEMPO que definen nuestra realidad física, o mejor dicho la tercera dimensión (3D). Podemos entender de hecho a la flor de la vida como una estructura geométrica de la que se forman otras como los sólidos platónicos. Pues bien, en este articulo vamos a adentrarnos un poco más y hablaremos sobre los números de la Flor de la Vida.
Su composición matemático geométrica está formada por 19 círculos completos, esto no es casual. Todo en lo que respecta a geometría sagrada tiene un sentido, un para qué. Vamos pues, a conocer mas sobre la flor de la vida y su numerología.
El número 19 nos habla de Inicio y Fin.
Esto se debe a que el número 1 nos habla de unidad, el origen de todo y el número 9 nos indica el final de ese camino que se inició en el 1, de la vibración espiritual y elevada.
Si sumamos el número total, o sea 19, obtenemos que se forma nuevamente el 1 (porque 19= 1+9 =10= 1) y eso nos indica que tras realizarse un camino de aprendizaje de continuo crecimiento del continuo perfeccionamiento espiritual cada uno de nosotros vamos transitando por los diferentes números que en realidad hablan de un nuevo estado de consciencia, de Ser, de evolución. Por lo tanto, hasta llegar al 9, el número de la espiritualidad y la trascendencia los números nos indican ese camino y nos dicen que iniciamos en el 1 (dormidos) y volveremos a la unidad (a la fuente), al 1.
Esa inteligencia creadora y matemática basada en equilibrio en proporción en números y geometría en liberación coherente definitiva nos impulsa a crecer, a superarnos, a transitar por el mundo físico en un cuerpo físico pero siendo seres espirituales que estamos experimentando en realidades físicas con el fin ganarnos la libertad, romper con esas ataduras físicas, accediendo a ese mundo donde todo es energía, donde todo es conciencia plena.
Esta flor de la vida habla por tanto de perfección, de condensación de vida desde el inicio hasta el final que nos regresa al inicio pero con un nivel muy superior, en otra frecuencia de vibración más elevada.
El mandala de la flor de la vida está formada por 36 arcos (19 circulos) que sumados de nuevo nos devuelve el mágico número 9!
Estos números de la flor de la vida: 3, 6 y 9 eran los números que por ejemplo tenían obsesionado al renombrado científico Nikola Tesla, que según sus estudios, son números bisagra que conectan la realidad física y la no física, lo visible y no invisible.
